Ya comenté el primer día que escribiría sobre todo aquello que me sorprendiera. Pues bien, ese "todo aquello" de hoy que, más que sorprenderme, me ha ¿irritado?, no, más bien entristecido, es un correo que me han mandado. El asunto: los libros prohibidos del Opus Dei.
Una lista con los libros no recomendados o directamente prohibidos del Opus Dei. Entre estos últimos he encontrado "La vieja sirena" de Sampedro o "El Evangelio según Jesucristo" de José Saramago. Ha sido aquí cuando mi irritación ha venido a desembocar en tristeza.
No quiero alargarme o aburriros con mi opinión al respecto. Creo que es mejor que os dirijáis al enlace que os doy y echéis un vistazo a la larga lista de libros con una puntuación de 6. Ya me contaréis...
Por cierto: ¿alguien ha visto "Camino" de Javier Fesser?
Jamás dejará de asombrarme la satisfacción con la que algunos aceptan recortes en sus propias libertades y derechos. Pero qué clarificadora resulta esta iniciativa que no hace sino dejar en manos de una institución la libertad de elección, la decisión de acceder al conocimiento. Eso que ellos defienden como 'el libre albedrío'. Control, puro control mental. Y, sin embargo, a pesar de toda esa voluntad de sometimiento y manipulación, qué paradójico resulta observar que también produce el efecto contrario: yo, que detesto a Stendhal, estoy sintiendo unas ganas irrefrenables de retomar sus obras. Por joder, vamos.
ResponderEliminar